viernes, 26 de septiembre de 2014

El Vaticano pide compartir responsabilidad para proteger el planeta



El cardenal Parolin interviene en el Climate Summit 2014. Pide cuidar y valorar la creación por el bien de la generación presentes y las futuras.

El cambio climático pone en cuestión aspectos no solo científico-ambientales o socio-económicos, sino también y sobre todo ético-morales, ya que incide sobre todo, y de forma particular en los más pobres, que están más expuestos a sus efectos. Lo ha afirmado el cardenal Pietro Parolin, secretario de estado del Vaticano, durante su intervención este martes en Nueva York en el Climate Summit 2014, en la 69ª Asamblea General de las Naciones Unidas.

Del mismo modo, recordó que la Santa Sede ha reiterado a menudo el imperativo moral para actuar, que interpela a cada uno de nosotros sobre nuestra responsabilidad de cuidar y valorar la creación por el bien de la generación presente y las futuras. Además, observó que el papa Francisco, desde el inicio de su pontificado, ha subrayado la importancia de cuidar nuestro ambiente que "demasiado a menudo no usamos para el bien, sino que explotamos con avaricia para el daño de uno contra otro".

Por eso, el purpurado destacó que frente a estos riesgos y costes, "debe prevalecer la virtud de la prudencia, que requiere deliberar bien en función de un análisis cuidadoso de los impactos futuros que implican nuestras acciones". Es decir, "requiere un gran compromiso político-económico por parte de la comunidad internacional, a la cual también la Santa Sede quiere dar su propia contribución, en la conciencia de que el don de la ciencia nos ayuda a no caer en algunas actitudes excesivas o erróneas".

Por otro lado, el secretario de Estado vaticano observó que desde que inició del debate sobre el cambio climático, en 1992, han cambiado muchas cosas. "Uno de los principales elementos surgidos en estos treinta y tantos años de estudios sobre el fenómeno del calentamiento global es la cada vez más fuerte conciencia de que toda la comunidad internacional forma parte de una única interdependiente familia humana", precisó. Y añadió que "las decisiones y los comportamientos de uno de los miembros de esta familia tienen consecuencias profundas sobre otros componentes de la misma".

Por eso, afirmó que para ser eficaces, "es necesario implementar una respuesta colectiva basada en la cultura de la solidaridad, del encuentro y del diálogo, que debería estar en la base de las internaciones normales dentro de cada familia y que requiere la plena, responsable y comprometida colaboración por parte de todos, según las propias posibilidades y circunstancias".

A propósito de lo indicado, el cardenal Parolín mencionó el concepto de la "responsabilidad de proteger". Y observó, "los Estados tienen una responsabilidad común de proteger el clima mundial a través de acciones de mitigación, adaptación y de compartir de las tecnologías y del "know-how". Pero, sobre todo, "una responsabilidad compartida de proteger nuestro planeta y la familia humana, asegurando a las generaciones presentes y futuras la posibilidad de vivir en un ambiente seguro y digno".

Por otro lado, el purpurado advirtió que sólo con las fuerzas del mercado, especialmente si no tienen una orientación ética adecuada, "no se pueden resolver las crisis interdependientes relacionadas con el calentamiento global, la pobreza y la exclusión". De ahí que destaca que "el desafío más gran está en la esfera de los valores humanos y de la dignidad humana; cuestiones que están relacionadas con la dignidad humana de los individuos y de los pueblos no pueden ser reducidas a meros problemas técnicos".

También explicó que en la Ciudad del Vaticano se están realizando esfuerzos significativos para reducir el consumo de combustibles fósiles, realizando proyectos de diversificación y de eficiencia energética. Además, el purpurado señaló que son muchas las instituciones educativas católicas, Conferencias episcopales, diócesis, parroquias y ONG's de inspiración católica comprometidas con este campo, "en la convicción de que la degradación de la naturaleza está directamente unida a la cultura que plasma la coexistencia humana". Y añadió "el respeto de la ecología ambiental es condición y está condicionada por el respeto de la ecología humana en la sociedad".

Para finalizar su intervención, el cardenal Parolin afirmó que "afrontar seriamente el problema del calentamiento global requiere no solo reforzar, profundizar y consolidar el proceso político a nivel global, sino también intensificar el compromiso de todos nosotros hacia una profunda renovación cultural y un redescubrimiento de los valores fundamentales sobre los que edificar un futuro mejor de toda la familia humana".

Fuente: Zenit.org

Al compañero, amigo y maestro: Gilberto Pauwels, OMI



A ocasión de la celebración del nombramiento como “ciudadano de honor” del municipio de Zonnebeke de la subalcaldía de Geluved, pueblo natal del Hno. Gilberto Pauwels, OMI.

En este día tan especial para ti, tu familia, tus amigos y todos los hermanos oblatos que te rodean; tus compañeros del CEPA, nos sumamos a la algarabía de ver tantos logros en 50 años de trabajo pastoral siempre buscando justicia social y ambiental  en estas  altas tierras andinas.

No logramos encontrar palabras que expresen nuestro agradecimiento de 35 años de servicio a nuestros pueblos. Pensamos que el esfuerzo que desplegaste por entender las raíces de nuestras culturas andinas, han acabado por absorberte, haciéndote al fin y al cabo, parte de nosotros, por lo tanto te has hecho un poco de aymara, quechua y Uru.

Quienes hemos aprendido de ti, (luchar por Derechos Humanos, la Justicia social y ambiental y lograr ver con sentido crítico las cosas) creemos haber encontrado también al compañero que nos acompaña en esta travesía: de lograr que otra forma de vida es posible, el sendero a seguir, el rol que nos toca jugar en la vida, creo que lo tenemos claro.

Compañero, amigo y maestro, a pesar de que con nuestras consultas no te dejamos disfrutar tus “vacaciones”, nos alegramos contigo tu gran logro que también es nuestro logro. Que Dios guíe tus Pasos, que estés siempre bien.

C.P.H. - CEPA

jueves, 25 de septiembre de 2014

Gilberto Pauwels, 50/40 años Norte - Sur



Agosto 1964  fue para Gilbert Pauwels un mes de grandes cambios. Durante seis años, todos los días había ido en bicicleta al colegio de la ciudad de Ieper, desde Geluveld, su pueblito natal a siete kilómetros de distancia. En aquel año terminó sus estudios secundarios y dejó de ser dirigente del movimiento estudiantil en el colegio y del movimiento juvenil parroquial. Se fue al noviciado de los Misioneros Oblatos (OMI); hace 50 años. 

Diez años después, en agosto 1974, los cambios fueron mayores. Desde Bélgica se vino a Bolivia, a Oruro. Durante diez años se había preparado, estudiando filosofía, ciencias religiosas y morales, teología de la misión, antropología social y cultural. Había escrito una tesis sobre la vivencia religiosa Aymara y una tesina sobre los Chipayas, a base de literatura, sin haberse encontrado todavía con ninguno de ellos. Actualmente, el encuentro vivencial y la convivencia con el mundo andino ya tiene una duración de 40 años. Y sigue. Gilberto es migrante en Oruro 40 años, ya desde más de dos generaciones. 

Después de un estudio etno-histórico y antropológico amplio de la región de Jach'a Carangas, enfocado sobre todo en la marka de Turco, fue co-fundador del Centro Diocesano de Pastoral Social (CEDIPAS) y lo  dirigió durante casi 20 años. Fue co-fundador y es director del Centro de Ecología y Pueblos Andino (CEPA), iniciativa de los Misioneros Oblatos, que igualmente, al año, el 8 de diciembre de 2015, va a celebrar sus 20 años de servicio al pueblo orureño.

En estas cuatro décadas, Gilberto no perdió el contacto con su tierra natal. Es precisamente por eso, por los 50/40 años, que en estos días su familia, su ex-parroquia Santa Margarita y el municipio de Zonnebeke (al cual ahora pertenece la sub alcaldía de Geluveld), han querido exaltar el nexo que de esta manera  ha crecido entre Bélgica y Bolivia. 

El alcalde y el consejo municipal, en coordinación con la parroquia,  decidieron  nombrar, por sus méritos en el  trabajo en Bolivia, a Gilbert Pauwels como cuarto "ciudadano de honor" en la historia del municipio de  Zonnebeke.  El anterior nombrado fue el ex-rector de la Universidad Católica de Loviana, Marc Vervenne, oriundo también del mismo pueblito de Geluveld (con apenas 1500 habitantes). 

El acto de la entrega se realizó en el templo mismo de la parroquia Santa Margarita, bajo la responsabilidad del concejal de relaciones internacionales y desarrollo, Luc Hoflack, y con la participación de los concejales del municipio; los miembros del grupo municipal de trabajo Norte-Sur; el diácono encargado de la parroquia, Lode Caes; las familiares de Gilberto  - que aprovecharon el evento para celebrar una fiesta de encuentro familiar -, y muchos amigos de la región y de organizaciones vinculados al trabajo de CEPA y de los Oblatos en Bolivia. El Coro Solidaridad "Vamos Pra Lutar" acompañó todo el evento con canciones alusivas a la lucha por de justicia y la defensa de la madre tierra.

Chris Dutry, co-fundador del CEPA, explicó a los presentes, el origen, la historia y las realizaciones de la institución. Así también Daan Janssens reveló los aportes que han tenido Gilberto y el CEPA en la fundación y el funcionamiento de CATAPA, organización dedicada al apoyo de voluntarios jóvenes desde Gante para la problemática socio ambiental en el Sur. Ahora CEPA tiene a CATAPA como su aliado en el Norte. 

Después de la entrega oficial, Gilberto agradeció a todos los participantes por su presencia.  Recordó sobre todo los primeros 18 años que había vivido en Geluveld, que es el tiempo el que se colocaron los fundamentos de su opción de vida y en que crecieron las raíces más profundos de su compromiso. 

En la homilía durante la Eucaristía con la cual concluyó el acto,  Gilberto enfatizó la importancia que había tenido en las diferentes etapas de su vida,-  desde su bautismo hasta el envío a la misión, - el espacio donde estaban reunidos para el acto: la iglesia parroquial. Pero al mismo tiempo recordó la experiencia que nos comparte la Iglesia de América del Sur. Las comunidades andinas nos recuerdan que Dios, estando en todas partes, tiene sus lugares preferidos. Dios está, intensamente, en y con  los pobres, en los excluidos y los humillados, en la naturaleza maltratada. Con ellos sufre y nos llama a la solidaridad, el compromiso, el respeto, la justicia y la paz. 

El evento fue calificado como una linda experiencia Norte -  Sur. Fue la confirmación de lazos interculturales ya intensos de apoyo, intercambio y acompañamiento, a base de contactos personales o mediante canales establecidos.

Ni un reasentamiento más pro minería



En el marco de la cooperación, solidaridad e intercambio de experiencias se participó en representación de CEPA del encuentro de comunidades afectadas por la minería en Colombia y se emitió en siguiente Comunicado Público:

Comunicado Público
“Ni un reasentamiento más por minería”

Entre los días 17, 18 y 19 de septiembre de 2014, nos hemos concentrado en la vereda del Hatillo, municipio del Paso, departamento del Cesar Colombia, un número aproximado de 120 personas de diferentes lugares del país entre ellas: Guajira, Antioquia, Santander, Bogotá, Costa Caribe y el acompañamiento internacional  de países como Bolivia, Argentina, Brasil, Chile, Acción Permanente por la Paz, la fundación FOR de EE.UU y la organización PeaceWatchSwitzerland.
Hatillo, frente a los pasivos mineros de Vale de Brasil

Dicho encuentro  tuvo como centro el hacer visible la situación que hoy viven y padecen las comunidades afectadas por los proyectos de la llamada locomotora minera especialmente El Hatillo y Boquerón. Aquí hemos evidenciado como la vida de las comunidades, su educación, el medio ambiente, el empleo, el trabajo, se han visto afectados a tal punto que estás necesidades básicas no se garantizan sino que por el contrario se acaban y dejan de ser reconocidos como derechos. De igual manera, su cultura, su cosmogonía y sus apuestas como pueblo están reducidas.

jugando futbol a lado del tajo y de los pasivos mineros
Hoy están a la espera de un reasentamiento involuntario, lo que quiere decir, “reubicación territorial por minería”, negando de plano un derecho fundamental como el derecho a la vida y a un territorio digno. Según la orden del Estado que obliga estos desplazamientos, la comunidad debe tener un acompañamiento psicosocial permanente, accesos a la información, asesores independientes en lo productivo y lo legal y deben poder gozar de un medio ambiente sano que les permita vivir dignamente mientras se da la reubicación. Hoy después de 4 años de proceso no reciben la atención psicosocial, su abogado tiene un futuro incierto, la seguridad alimentaria está menguada con medidas transitorias no sostenibles y las minas están buscando permisos ambientales para crecer y crecer  contaminando más a estas poblaciones con miras a desgastarlos y vulnerar los derechos de sus mujeres, niños y ancianos.

Análisis -debate en la comunidad Hatillo
Por lo anterior, todas y todos nosotros queremos hacer público nuestro descontento con la manera como los territorios y las comunidades como El Hatillo son tratados como ciudadanos de 2ª y 3ª categoría y a la vez se pone en riesgo su hacer como líderes y lideresas. Hacemos un llamamiento a la comunidad nacional e internacional para que se haga visible no solo lo que sucede sino para exigir al Estado y al Gobierno Nacional, así como a las multinacionales presentes en la zona, se cuente con garantías que posibiliten un mayor reconocimiento del papel que deben jugar ambas partes.

Llamamos a todas las organizaciones sociales del país para que hagan visible lo que sucede aquí y se logren acciones de dignidad y respeto con los territorios así como una Comisión Nacional  que garantice un proceso de reasentamiento digno. Exigimos el respeto a la cultura, a las raíces, que se devuelva la dignidad y el reconocimiento a dichos territorios para devolverles así lo negado, lo usurpado, lo expropiado, y poder luego construir un país sin guerra, sin miedos, sin violencia y sin expropiación.

POR UN HOGAR, UN PAÍS Y UN PLANETA LIBRES DE GUERRAS, MIEDOS, VIOLENCIAS Y REASENTAMIENTOS POR MINERÍA

EL PASO, VEREDA EL HATILLO, Septiembre 19 de 2014

Organizaciones e instituciones firmantes:

  • Ruta Pacifica
  • Organización Indígena de Antioquia – OIA 
-          Resguardo Marcelino Tascón (Antioquia)
  • Comunidades Guajira: 
-          Tamaquito II; Patilla ancestral; Patilla Nuevo; Chancleta ancestral; Chancleta nuevo; Roche ancestral; Roche Nuevo; Las casitas; Tabaco
  • Organización Asprocig (Cordoba)
  • Justiça Nos Trilhos (Brasil)
  • Associação Comunitaria Dos Moradores do Piquiá de Baixo (Brasil)
  • Red Internacional de los Afectados por la Vale
  • Red Sombra: seguimiento Glencore Xstrata
  • BePe (Argentina)
  • Colectivo SumajKawsay (Argenina)
  • Centro de Ecología y Pueblos Andinos – CEPA (Bolivia)
  • Pensamiento y Acción Social – PAS
  • Patricio Pérez Gallardo – Geógrafo Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (Chile)
  • LizedNoreña – Trabajadroa Social Universidad de Antioquia
  • Justiça Global (Brasil)
  • Zohanny Arboleda
  • Tatiana Cuenca
  • Centro de estudios y Justicia Social Tierra Digna
  • Comunidad de Boquerón
  • Comunidad del Hatillo
  • Comunidad de Don Jaca
  • Derechos Humanos Sin Fronteras (Perú)
  • Federico Piñeros – Antropólogo Universidad de los Andes
  • Fernando Vargas Valencia, Abogado defensor de Derechos Humanos