lunes, 4 de agosto de 2008

La Música en Salinas de Garci Mendoza

No todo lo que brilla es oro, dice Macedonio López en su libro PROVINCIA LADISLAO CABRERA, al hacer referencia sobre la música popular que los antepasados de esa provincia cultivaron.

“La tradición cuenta que la música autóctona fue muy variada, los instrumentos utilizados fueron: zampoñas, quenas, julajulas, guitarrillas y charangos, estos dos últimos durante la colonia. Nos olvidamos de nuestra música, nos olvidamos de una “pandilla” que antaño fue amenizada por guitarrillas, de los “chutos”, de las “quenaquenas” , de los “cajanis” y otros, nuestros antepasados bailaron el “chuncho” el 16 de julio, fiesta de la Virgen del Carmen al son de la quena.

Nos olvidamos de las zampoñas, de ese rico aire nativo, sentimental pero alegre; desapareció el gran conjunto de Churacari que se lucía el 14 de septiembre; el de Callohalca, Luca, Vinto, Colcaya Ancoyo y Chilalo que eran los más exponentes de la fiesta de Santiago y cambiaron por la banda de músicos; por último el de Tocoroma, y Sevengani que era la expresión auténtica de la Fiesta de Guadalupe (8 de septiembre), nos olvidamos del “Masuru waruru” ejecutada en una zampoñada.

Ingratitud imperdonable, se puede recuperar la zampoñaza que ahora nuevamente se ejecuta en algunas comunidades; pero las pandillas, las julajulas, los “llano bailes” y otros, no podrán recuperarse porque a través del tiempo se ha perdido por completo su esencia misma.

Lo único que no olvidamos es la “anata” que sigue siendo original, música propia del pueblo salineño, fiel expresión de su progreso cantando en sus huayños.”


Texto extraído del libro: PROVINCIA LADISLAO CABRERA. Del autor: Macedonio López Condori. CEPA. Oruro 2008. 184pp.