jueves, 21 de junio de 2007

Año Nuevo Aymara

Hace pocos días atrás, participé de una actividad importante del Centro Cultural Sartañani (Centro conformado por jóvenes que buscan recuperar la ideología de nuestros antepasados y replicar en plena ciudad la vivencia de las comunidades Andinas).

En el día del Año Nuevo Aymara se realiza el cambio de autoridades. Posteriormente se sube al cerro donde está un lugar sagrado, llamado Kori Cancha. Allí se realizan los ritos respectivos y se recibe la energía de los primeros rayos del sol “Tata Inti”, iniciando un nuevo ciclo, una nueva vida…

Un poco de historia sobre el Año Nuevo Aymara

En una entrevista realizada el 20 de junio, Verónica Huarachi Apaza, Mama T’alla menor Urinsaya, una joven autoridad saliente de este Centro (C.C.A.S.W.Q) nos comentó lo siguiente:

EL TATA INTI Y SU FIESTA

En 1572 el Virrey Francisco Toledo prohibe la fiesta del Inti Raymi (fiesta del Sol en Quechua) y sobre pone la fiesta de San Juan según el calendario cristiano. Este festejo al Nuevo Año o Machaq Mara en aymará o Wetipantu (nueva salida del sol) en Mapuche, no se ha perdido de la memoria de los abuelos y continua hasta nuestros días, aunque de manera camuflada.

Celebramos a nuestro Tata Inti (Padre Sol) que por medio de sus rayos da energía a la tierra y permite que la vida se regenere año tras año, pero este equilibrio vital está amenazado por nosotros mismos al continuar contaminando a nuestro planeta. De los daños a la capa de ozono pueden resultar aún peores consecuencias.

Hoy más que nunca necesitamos reflexionar sobre nuestros actos para así buscar una convivencia en armonía entre nuestro planeta, el cosmos y nosotros mismos.

Alicia Cuiza

miércoles, 13 de junio de 2007

Necesitamos Aire Limpio en Nuestra Ciudad

A lo largo de la historia, el hombre ha trasformado su medio ambiente a su conveniencia y comodidad, olvidando muchas veces que él y la naturaleza se rigen por el mismo motor.

Nuestra ciudad, es un ecosistema urbano, donde la sociedad y la naturaleza deben tener una interacción equilibrada y debe mantenerse a lo largo del tiempo.

Sin embargo, las ciudades o centros urbanos necesitan una compleja red de comunicaciones y transporte principalmente que garantice y agilice el flujo diario de las personas y mercancías, por lo tanto esta dinámica urbana genera problemas de tráfico y colapso circulatorio, especialmente en las horas punta (de entrada y salida laboral). Por ello la contaminación acústica y atmosférica que dicho tráfico ocasiona tiene una repercusión negativo en el medio ambiente y en la salud de la población urbana.

Sabemos que contaminación atmosférica, es cualquier sustancia físico, química o biológica que altera la atmósfera, o el aire, y si nos damos cuenta uno de los principales problemas ambientales en los centros urbanos es precisamente la contaminación atmosférica.

Cuando la calidad del aire esta dañada por esta contaminación se convierte en una amenaza para la salud de la población y medio ambiente. Según estudios del Banco Mundial se estima que el 70 % de América Latina la contaminación del aire proviene del parque automotor.

A los problemas medio ambientales generados por el tráfico de vehículos, se suma la necesidad de evacuar y reciclar las basuras y residuos sólidos generados a diario y dar salidas a las aguas residuales.

Por todo el daño que se genera al medio ambiente urbano, se debería impulsar otras medidas. Sugerimos algunas, que pueden contribuir a la disminución de la contaminación del aire por parte del parque automotor principalmente:

- Uso de vehículos de bajo nivel de emisiones y consumo u otras orientadas a promover el uso de combustibles alternativos.

- El mantenimiento técnico preventivo de los vehículos públicos y privados que debe incluir el afinado de motores, cambios de filtro de aire y de aceite.

- La disminución del uso innecesario de vehículos en las ciudades, optando mejor por el transporte público.

- La utilización de combustibles que no contaminen el aire (como por ejemplo el gas natural vehicular)

Eva Garnica Bahoz
CEPA (Centro de Ecología y Pueblos Andinos)
Oruro- Bolivia